Esta es una respuesta subjetiva. Y no, no creo que se estén produciendo demasiados teléfonos inteligentes. El aumento en la cantidad de teléfonos inteligentes solo garantiza una competencia más saludable entre los fabricantes.
Y, ¿los actualizamos con demasiada frecuencia? Definitivamente no.
En primer lugar, una persona nunca se ve obligada a actualizar su teléfono inteligente. Compramos teléfonos nuevos porque nos gustan sus características / apariencia / algún otro aspecto del teléfono que es mejor de lo que tenemos actualmente. Además, hay una multitud de aplicaciones que requieren una mejor hoja de especificaciones para funcionar como fueron diseñadas. Por lo tanto, actualizamos.
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En segundo lugar, cada nuevo teléfono tiene ciertas actualizaciones / nuevas características que son útiles para alguien en algún lugar.
Tomemos, por ejemplo, el caso de un laboratorio de diagnóstico de sangre. Ahora, en este escenario hipotético, supongamos que el laboratorio tiene un cierto equipo que puede detectar 5 enfermedades diferentes y que lleva 15 horas identificar cada enfermedad. Ahora, un nuevo dispositivo llega al mercado que es casi igual, pero puede probar 2 de las 5 enfermedades en 8 horas en lugar de 15, lo que garantiza resultados más rápidos para varios pacientes. El laboratorio ahora tendrá que actualizar a este nuevo dispositivo o corre el riesgo de perder negocios.
La política de actualización de teléfonos inteligentes es bastante similar. Todo se reduce al propósito para el que lo está utilizando. Naturalmente, no es necesario actualizar su teléfono inteligente, pero si lo hace, es porque el nuevo modelo tiene algo que su teléfono actual no tiene e inventar algo nuevo nunca ha sido realmente perjudicial para la sociedad.